En
1617 fue fundado el pueblo de Indios de Santa Catarina Virgen y Mártir del
Rioverde por Juan Bautista de Mollinedo, en el “Palmar”, (actual asiento de de Iglesia) en ella se avecindaron
los indígenas bautizados y algunos españoles; y se convirtió después en el eje
central de la Custodia.
Santa Catarina Virgen y Mártir
(Nostalgica es lo minimo que podemos decir de esta fotografia, como se ve tal parece que esta una bandera sobre los arcos y no existe la "plaza de las tortugas" y seguramente no estaba la calle de "Morelos")
A partir de las primeras
exploraciones, comenzaron a difundirse las noticias sobre el valle del río
Verde y sus tierras fértiles. Al poco tiempo fueron concedidas algunas
estancias a españoles provenientes de Querétaro. Esto ocurrió algunos años
antes de que se fundara el pueblo, y las estancias se ubicaron en las mejores
tierras y casi siempre cerca de las fuentes de agua.
Querétaro antiguo
Pedro
de Sifuentes fue de los primeros españoles que llegaron a poblar la región.
Cerca de la Media Luna
estableció una estancia que se convertiría después en la hacienda Nuestra
Señora del Rosario, también llamada El Jabalí.[1]
El
Jabalí
A
partir de 1601 se concedieron nuevos repartimientos de tierras, por ejemplo,
Vasco López de Rivero recibió casi diez mil hectáreas cerca del mismo
manantial; Luis Cárdenas se adueñó de gran parte de las tierras en las que se
ubicaría después la hacienda Acequia Salada, también conocida como La Boquilla ; y Cristóbal de
Solana fundó la hacienda de Ojo de Agua de Solana cerca del río Verde y de uno
de los antiguos manantiales.[2]
Acequia
Salada - “La Boquilla”
Más
al norte se fundaron también las haciendas de Angostura y Diego Ruiz, para
dadas las condiciones climáticas y la ausencia sobre todo de agua dulce, se
dedicaron principalmente a la ganadería y el desarrollo agrícola fue menos
notable que en el sur.
Trojes de la Hacienda de Angostura
Para
el siglo XVIII ya estaban fundadas casi todas las haciendas, y estas se
ubicaron en la periferia de los pueblos de Rioverde y la Villa del Dulce Nombre
de Jesús. (o la Villa de Santa Elena y del Dulce Nombre de Jesús como se aprecia en documentos de principios del Siglo XVIII que se encuentran en el Archivo Histórico Municipal)
La
agricultura y la ganadería seguían siendo las actividades económicas
principales. Y como las tierras de los alrededores pertenecían a las haciendas,
los habitantes de Rioverde sembraban en el interior del pueblo, beneficiados
por un sistema de irrigación que consistía en canales o acequias en los que
trasladaban el agua de la
Media Luna. Con esto cultivaron por mucho tiempo frutas como
higos, plátanos, duraznos, naranjas, limas, limones, ciruelas, granadas y
tunas; además del maíz, chile, frijol, camote, cacahuate y algodón.
Historiador Sergio Alejandro Moreno Ramírez
Los entrecomillados () y el pie de fotografía subrayado los puso este Blogero
La foto primera corresponde a San Ciro de Acosta, llamado en ese tiempo Villa de San Ciro....
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