jueves, 29 de enero de 2015

“La Historia de Zafira” 1ª. De 2 partes

LA BODA DE LA ABUELITA
ZAFIRA TELLO GUILLÉN


“La Historia de Zafira”
1ª. De 2 partes

El capitán Francisco terminó sus días súbitamente tras una enfermedad que bien que mal le dejó tiempo para decirle unas palabras plenas de cariño paternal a su pequeña hija Zafira.

Ahí se puede decir que comenzó su historia, la de verdad. En la vida de cada quien debe haber un momento que se puede volver un parteaguas, un punto para decir “antes” y “después”. Para Zafira debió ser entonces, cuando el falleció dejándola acá, y apenas empezaban sus dolores.

Al año le tocó el turno a su madre, Doña María Guadalupe, valiente mujer originaria del norte de Querétaro. Y al año siguiente, siguió la hermana mayor Ofelia. Y entonces quedaron tres niñas solas casi desamparadas; Helia, Carolina y la más chica Zafira.

Los parientes se encargaron de ellas. Pero por supuesto todo cambió para las tres. Dejaron de ser las hijas de la casa, atendidas por los sirvientes, para convertirse en las pequeñas sobrinas, las que trabajaron por su sustento, recibiendo como tributo cotidiano, solo el alimento del día.

Cuando esto sucedía, el país y el Estado empezaban a recuperarse de los terribles años de luchas armadas, la Revolución, la Cristiada, el Cedillismo, y no eran tiempos prósperos, desde luego.

Antes, años antes, otra historia había arrancado y entonces llevaba la delantera. Un muchacho tuvo que dejar Ébano para volver a la tierra de su padre D. Eulogio, pues debió este dejarlo todo, empleo y sustento para curarse del reuma en su propia región.    
     
Este joven era J. Asunción, de apodo “Chon”. Y la mudanza no le gustaba nada. Tenía un sueño, quería trabajar en la empresa petrolera de los gringos cuando acabara la primaria. Pero este sueño se vio truncado bruscamente. Y le dolía.

Que cosa venimos a hacer a este destierro, se decía en la soledad del pastoreo de vacas, en medio de crecidos pastos y herbájales. Se paseaba con una vara para prevenir la aparición de serpientes y con miedo empezaba una nueva vida, en un pueblo casi en ruinas, apenas salido de la violencia revolucionaria y del bandidaje.

Chon, ese muchacho que no pudo soportar el uso de huaraches, pronto demostró de qué madera estaba hecho, fuerte, como el mezquite de los zaguanes de Rayón.

Luego de trabajar en el campo con su padre, le pidió que lo dispensara para buscarle por otro lado,, pues decía, mire papá, yo ando muy a gusto trabajando con usted, pero mi madre es la que la lleva, siempre trata de estimularnos con los alimentos, y ya empezó a pedir fiado” y así D. Eulogio lo dejó pedir empleo, y lo consiguió como ayudante en la tienda de un tío.

No duró mucho allí, y el destino lo llevó con D. Valeriano. Él lo contrató para manejar el primer tractor que llegó al pueblo. Y como desde siempre le gustaron las cosas mecánicas, se halló muy bien en su nuevo empleo, donde prosperó. Ganaba bien, a comparación de un peón, y demostraba orgulloso su habilidad y pericia.

Conocido como “Don mil amores”, sabía sacarle chispa a los tacones en todos los bailes, dicen que llegó a tener hasta siete novias; y al mismo tiempo se destacó como un hombre honesto y muy trabajador.

En una de esas, le ofrecieron a pagos unos molinos con una planta de energía eléctrica, después de ser el empleado fiel que desde la madrugada lidiaba con el humo y el diésel para mantener la pequeña empresa funcionando con su solo trabajo saldó la deuda y pasó a ser el dueño.

Don Chon el molinero, así lo conocieron las señoritas Tello, las hijas del Capitán Francisco.

… en el siguiente y ultimo capitulo entra directamente Zafira en escena.

La verdad no sé de donde saqué esta historia, alguien que no recuerdo me la llevó como un trabajo de Historia, pero me parece bonita y quiero compartirla, parece que sucedió en Rayón, pero no estoy segura.

Lic. Elena Rodríguez de la Tejera


Este Blog Agradece a ambas por compartir esta historia y esperamos que más personas de este y otros Municipios se animen a escribir y mandarnos sus historias personales junto con fotos familiares y de este modo estaremos cumpliendo una de las finalidades de  este Blog; la de  difundir la historia Regional.


Gracias, su amigo R2D2

1 comentario:

  1. La historia es de mis abuelitos, y supongo que mi primo se la llevo a su trabajo de historia, muy lindo que se propague su historia que le aseguro fue llena de amor y respeto ☺️👌

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