Puesto que los vecinos del edificio eran antiguos peones y hacia mucho tiempo que no había escuela primaria es este lugar se opto por iniciar el reclutamiento de alumnos de Rioverde y Ciudad Fernández, los maestreo con que se contaba inicialmente fueron tres: El Director de la escuela, el Profesor José de la Vega y los Profesores Alfredo Aldana y Francisco Chessani.
Se solicito el apoyo de presidentes municipales de
casi todo el estado para aumentar el número de alumnos que sintieran alguna
vocación por el magisterio. De este modo recibieron alumnos de los municipios
de: Tancanhuitz, Tamazunchale, Santa María del Rio, Valles, Cerritos, Cárdenas,
San Ciro, Ciudad Fernández y Rioverde.
Se aceptaron varones y señoritas, logrando en el
primer semestre de trabajo una inscripción de 15 señoritas y 26 varones, de los
que presentaron examen únicamente 36, excluyendo solo a 5 debido a la selección
de alumnos que se hizo de acuerdo con el carácter de la escuela.
La Escuela Normal Rural de Rioverde trabajo a base de
hogar y libertad; la vida en el internado sirvió para constituir dentro de la
escuela una gran familia en la que figura la confianza y el respeto mutuo.
Los alumnos tomaban parte en las faenas domesticas;
sin llegar a reglas rígidas, el trabajo fue siempre equitativo bajo una
reglamentación formulada por ellos mismos. El horario de actividades de la
escuela fue de 6 de la mañana a las 8:30 P.M. incluyendo la atención de la
nocturna anexa.
En la organización de la escuela se formaron
sociedades como: Sociedad de alumnos, Comité pro-ayuda, Liga deportiva,
Cooperativa agrícola, Sociedad cooperativa de producción y consumo. Sociedad
periodística y Sociedad literaria juvenil.
Fotografia: Archivo Historico de Ciudad Fernandez
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