jueves, 20 de diciembre de 2018

HISTORIA DE RIOVERDE - Dr. Carlos Gama – Parte 10



Rafael del Castillo

Revolución; antecedentes e inicio
Se calcula que al estallar la Revolución Mexicana en 1910, la población de Rioverde era de 50,565 personas.

Las condiciones de pobreza, marginación y explotación que vivían las clases menesterosas y el descontento por el reparto de la riqueza, fue el caldo de cultivo para el surgimiento de clubes antireleccionista en abierta oposición al régimen porfirista.

Las huelgas de Cananea, Son., y de río Blanco, Ver., en 1906 y 1907, protestas reprimidas con violencia por el aparato porfirista, constituyeron el antecedente de una de las primeras revoluciones del mundo occidental en la primera década del siglo XX.

En 1908, el presidente Porfirio Díaz en una entrevista que concedió al periodista James Creelman, afirmó que México estaba listo para entrar a la democracia y que vería con buenos ojos la aparición de grupos políticos que contendieran en las elecciones de 1910. Todo pareció indicar que Díaz, después de siete reelecciones, se retiraría de la Presidencia de la República.

Uno de los personajes más convencidos de que podía ganar la lucha política electoral al sistema dictatorial fue el rico hacendado coahuilense don Francisco I. Madero quien, en abierta oposición al Porfiriato se convirtió en su contrincante en las elecciones presidenciales de 1910.

En el mes de abril de 1910, Madero recorrió nuestra entidad buscando el apoyo de los potosinos. Durante su estancia en nuestro estado estableció contacto con algunos anti-reeleccionistas como Pedro Antonio Santos y el Dr. Rafael Cepeda.

En junio del mismo año, Francisco I. Madero y Roque Estrada fueron aprehendidos en Monterrey bajo el cargo de ofensa e injurias al presidente Díaz y como el hecho por el que se le acusaba había ocurrido en nuestro estado, fueron encarcelados en la penitenciaría de San Luis Potosí.

Pedro Antonio de los Santos, pasante de Leyes, consiguió la libertad bajo caución de Madero y Estrada el 23 de julio del mismo año. Sin embargo, debieron permanecer en la ciudad de San Luis Potosí, la que se les asignó como prisión.

La estancia de Madero en la entidad le permitió redactar parte del Plan de San Luis, documento histórico con el que hizo un llamado al pueblo de México para levantarse en armas el 20 de noviembre de 1910. Este plan fue promulgado desde Estados Unidos a donde Francisco I. Madero, ayudado nuevamente por Pedro Antonio de los Santos, huyó jal fugarse de San Luis Potosí.

Madero dio instrucciones a Santos de iniciar levantamientos armados en la Huasteca potosina, para dar inicio a la revolución. Por su afición a la compra de caballos y bestias de carga, el lagunillense Pedro Montoya entró en contacto en la huasteca con la familia Santos, oriunda de Tampamolón de Corona, de quienes recibió el encargo de tomar Alaquines o Rayón.

Montoya tomó el 30 de abril de 1911 San Ciro, en donde murió, sitiado en su casa y asesinado a sangre fría, cuando la autoridad municipal era el presidente don Pedro Morales Rocha. Esta fue la primera acción armada en la región en contra de la dictadura porfirista. Después se dieron el ataque a Lagunillas, el asalto a las haciendas de San Isidro, San Rafael, La Sanguijuela, Guayabos y San Vicente. La revolución continuó su marcha hacia Xilitla.

La revolución, como avalancha que dest4ruye todo a su paso, acabó con el esplendor de las haciendas de la región del río Verde. Más inteligente que la mayoría de estas cultas y finas familias hacendadas, fue la reacción de los terratenientes huastecos, entre ellos la familia Santos, que participó en la revolución para defender sobre todo sus bienes.

Antes de 1910 no tenemos noticia de algún hecho armado que haya trastocado la paz rioverdense; ni el acontecido en n1905 cuando Vicente Cedillo atacó la hacienda de Minas Viejas en Ciudad del Maíz. Esta revuelta fue controlada sin costa de vidas humanas.

Ante el avance del levantamiento armado, el general Porfirio Díaz renunció a la Presidencia de la República y abandonó el país en junio de 1911, rumbo a Paris donde murió años después. Convocadas las elecciones, Francisco I Madero fue nombrado presidente de México. Sin embargo, diversos grupos armados continuaron luchando en varios puntos del país.

Primera toma de Rioverde.


El 11 de marzo de 1912 se registró el primer ataque que sufrió nuestra población, cuando cincuenta hombres al mando de Daniel Berrera, Julio del Castillo, Aniceto Flores y el rioverdense Sidronio Méndez Tomaron Rioverde.
Los levantados exigieron al Jefe Político, José Verástegui, que entregara la plaza. Así lo hizo Verástegui y com8nicó a los rebeldes que, las autoridades de san Luis Potosí ya estaban enteradas del ataque y que era inminente la llegada de tropas del ejército federal. El grupo revolucionario nombró como jefe político de Rioverde al Dr. Eleno Cervantes quien ocupó el cargo de manera provisional.

Al siguiente día sabiendo que las tropas de refuerzo estaban próximas a arribar a esta ciudad y que los superaban en proporción de 4 a 1, los rebeldes abandonaron la plaza, no sin antes exigirle al tesorero municipal Rafael Barragán que les entregara todo el efectivo ($300). Al dejar Rioverde, se llevaron todas las armas y municiones que había en la presidencia municipal.

De aquí partieron rumbo a la hacienda de El Jabalí, de donde se llevaron tres caballos de raza fina y otros bienes propiedad del coronel Escandón, después continuaron por el rumbo de Rayón.

El 11 de junio de 1912, Daniel Becerra junto con graciano Olguín y Federico Martínez Participaron en la toma de Ciudad Fernández. Destituyeron a la autoridad municipal. Valente Piña, nombrado en su lugar a Cornelio Medellín. Al dejar la plaza se llevaron las armas y el parque que había.


Digitalización: José J. Alvarado

0 comentarios:

Publicar un comentario