Isnarda Cervantes Álvarez
(La India Edelmira)
Nació en Rioverde, el 22 de marzo de
1955. Recibió este nombre de acuerdo al Calendario Galván, por ser el día de
San Isnardo. Sus padres fueron José Cervantes Elizarrarrás, oriundo de Pénjamo,
Gto., y de María Álvarez Juárez de la ciudad Naranjera. Su padre llegó siendo
niño, puesto que su abuelo Martín Cervantes tenía un telar de cobertores de
lana, hubo una desavenencia entre ellos y su progenitor de 14 años se vino sólo
a la ciudad de los Azahares, donde se dedicó a la compara venta de carbón,
después al cálculo de la producción de naranja, famoso por ser muy atinado, con
solo caminar en círculo alrededor de una huerta y una libreta de bolsillo
calculaba la cosecha con sorprendente exactitud. Trabajaba para José Romo,
Gabriel Martínez, Salvador y Juan José Izar Noemí, José M. Martínez Ortega,
Goyo López, Luis Neri, Jesús Alvarado Cervantes, Galdino Martínez Rodríguez y
hermanos, J. Trinidad Zárate, Adolfo López Díaz, J. Refugio López, quienes
cultivaban las mejores huertas de cítricos, entre otros.
Sus progenitores se conocieron
porque él frecuentaba la casa de don J. Trinidad Zárate, debido a las
compra-ventas de cosechas de naranja, donde María Álvarez era nodriza de dicha
familia. Isnarda de una familia de diez hermanos, seis mujeres y cuatro
hombres, estudió en la escuela Josefa Ortiz de Domínguez, su maestra de primer
grado fue Librada de la Cruz, y la directora Carmen Velarde. También en la
escuela Pedro Antonio de los Santos, donde la directora era la enérgica Dolores
Herrera viuda de Richard; sin embargo, Isnarda la hacía reír con sus
ocurrencias y hacía que aflojara su dureza.
Cuando sus maestros o maestras
dejaban solo al grupo, ella se ponía al frente del pizarrón o al escritorio e
imitaba a todos sus mentores, mientras un compañero avisaba el regreso de la
ausente; una ocasión que los tenía atacados de risa, a tal grado que no le
avisaron que se aproximaba su maestra Guadalupe Trejo, de Cuarto Año, que al
sorprenderla le arrojó el borrador de madera. Ella evadió el golpe, pero el
proyectil impactó en la frente a Jesús Patiño, le causó tal hemorragia, que no
se la podía contener y esto causó mucho escándalo.
Ahí perteneció a la Banda de Guerra,
fue capitana de boli bol, declamaba y dirigía las obras de teatro, participaba
en todos los concursos y en todos los torneos. En el Colegio de la Paz fue de
la generación de Gloria Pastrana Hilda Faride de la Tejera Buneder, de Yeya
Tenorio, Martha Tenorio, Araceli Quevedo, Las Güeras Rivera, Lulú Ríos, Nena
Rivera, de las Limón, las Morales, entre otras, ellas fueron su inspiración
quienes la motivaron a superarse, y lo logró sin ningún complejo.
Información y fotografías:
Lic. José de Jesús Alvarado Orozco
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